Mire, como en su mirada,
cuando sueña, me miro…
Y al suspirar yo le digo
si usted sabe ¡que estoy enamorada!
Mire: como en su mirada,
resplandece con fuego mi alma.
No se vaya: es toda la calma
que me descarga y abraza.
Dios sabe ¡que es un martirio!
el que vivo, por su noble cariño.
Búsqueme siempre en su mirada,
desde lejos, me hallará enamorada.
Y lágrimas de quebranto
le dedican ¡por Dios, este bello, bello canto!
cuando sueña, me miro…
Y al suspirar yo le digo
si usted sabe ¡que estoy enamorada!
Mire: como en su mirada,
resplandece con fuego mi alma.
No se vaya: es toda la calma
que me descarga y abraza.
Dios sabe ¡que es un martirio!
el que vivo, por su noble cariño.
Búsqueme siempre en su mirada,
desde lejos, me hallará enamorada.
Y lágrimas de quebranto
le dedican ¡por Dios, este bello, bello canto!
No hay comentarios:
Publicar un comentario