Alpargatas rotas,
con frío o sin él,
Juanito va al campo a sembrar.
Tiene hermanitos,
una mamá,
(y un papá
(y un papá
que nunca conocerá)
por eso él
con diez años
va a trabajar,
porque tiene mente
de más edad…
Y aunque le griten
¡Apurate! ¡Negrito!
El está feliz igual,
cada tanto al rancho
el pan llevará...
Los pies curtidos
las manos también,
las manos también,
le abren caminos
hacia el campo a sembrar.
Trabaja y vuelve a trabajar
a veces cae la noche,
a veces cae la noche,
y las estrellas conmovidas le dicen,
hoy no vuelvas, acurrucate...
hoy no vuelvas, acurrucate...
-Te vamos... a, cuidar !.
ANAMARÍA BLASETTI