Tía Emma, tía Emma,
con esa mirada
de terriblemente buena,
con esa sonrisa
de unión,
con esas manos santas
que acarician
con su consejo
para vivir mejor,
ni la flor más bella
se parece
a tu estrella interior;
es que…
tienes que saberlo,
te quiero tía, te quiero.
sólo lo sabría
quien tuviera una tía
como la mía!!!
Pero… no busquen
tanto amor,
otra igual no existe,
porque a ella, los ángeles
la visten!!!
ANAMARÍA BLASETTI